En este Viernes Santo unámonos en oración por todos aquellos que se ven sufriendo una condena injusta. — Colabora con la Misión del P Romanelli
Nuestro amable Redentor se acerca al fin de su carrera. Contempla, alma mía, aquellos ojos que se obscurecen, aquel hermoso rostro que se torna pálido,