Meditación
El costado traspasado – Fulton Sheen
Cuando nuestro Señor exhaló su último suspiro, a los dos ladrones les rompieron los huesos para apresurar su muerte. Le ley ordenaba que el cuerpo
Cuando nuestro Señor exhaló su último suspiro, a los dos ladrones les rompieron los huesos para apresurar su muerte. Le ley ordenaba que el cuerpo