Queridos todos,
San Ignacio de Loyola nos dejó en sus Ejercicios Espirituales unas reglas para discernir la voluntad de Dios en mi vida, eligiendo siempre lo que más pueda conducirme al fin para el que somos creado, sin dejarse detener por desolación alguna.
Pidámosle a Nuestra Madre que nos ayude a discernir la voluntad del Padre.
¡Ave María y adelante!
† Por la Señal de la Santa Cruz …
Acto de Contrición
Señor Jesucristo, que de Creador has venido a hacerte hombre, y de vida eterna a muerte temporal, y así morir por mis pecados, te pido perdón por todas las ofensas cometidas contra tu Sacratísimo Corazón y te suplico la gracia de alcanzar un crecido e intenso dolor y lágrimas de mis muchos pecados. Amén.
Oración a San Ignacio
Glorioso San Ignacio, que nos diste ejemplo admirable de cumplimiento de la voluntad de Dios, y nos has dejado los santos Ejercicios Espirituales como método preciso para discernimiento espiritual y herramienta valiosísima para ordenar nuestra vida según el beneplácito divino, te pedimos que intercedas por nosotros y nos alcances la gracia de poder vencer nuestros afectos desordenados y así en todo amar y servir a su divina majestad. Amén.
Texto para la meditación del día
San Ignacio de Loyola nos dejó en sus Ejercicios Espirituales unas reglas para discernir nuestros pensamientos, cuál es su origen y, por tanto, qué hacer con ellos [EE Num 313 a 336]. Este discernimiento nos ayudará a tener paz -cosa tan importante- y a saber tomar las decisiones que sean acordes a la voluntad del Señor.
Tanto la consolación como la desolación son tiempos para crecer espiritualmente, pero sin duda las desolaciones son más difíciles de pasar, por eso recordamos lo que nos enseña el Santo [EE Num 317] que “ … en tiempo de desolación nunca hacer mudanza mas estar firme y constante en los propósitos y determinación en que estaba el día antecedente a la tal desolación, o en la determinación en que estaba en la antecedente consolación”.
Oración
San Ignacio, ayúdame a discernir la voluntad de Dios en mi vida, eligiendo siempre lo que más me conduce al fin para el que soy creado, sin dejarme detener por desolación alguna.
Petición de la novena
(hacer la petición que se quiere alcanzar en esta novena por intercesión de San Ignacio)
Padre Nuestro, Ave María, Gloria.
Oración final
San Ignacio, tú nos mostraste que siendo dóciles al Espíritu Santo podríamos ordenar nuestra vida, te pedimos en esta novena nos alcances la gracia de saber usar de todo lo creado “tanto cuanto” según la voluntad de Dios, para que todas nuestras decisiones sean puramente ordenadas según su santa voluntad y para mayor honra y gloria suya.. Amén
“Tomad Señor y recibid toda mi libertad, mi memoria, mi entendimiento y toda mi voluntad. Todo mi haber y mi poseer, Vos me lo disteis, a vos, Señor, lo torno, todo es vuestro, disponed a toda vuestra voluntad, dadme vuestro amor y gracia que ésta me basta”. Amén
Letanías de San Ignacio
De manera opcional les ofrecemos las letanías a San Ignacio en formato de PDF: