Aquel francés que hace 500 años, el 20 de mayo de 1521, cargara lo que se conoce como el arma de fuego portátil más antigua, la bombarda, nada pudo imaginar la trascendencia de lo que estaba haciendo.
Homilía diaria del Jueves Santo: la Eucaristía nos da vida, predicada por el padre Jon de Arza, monje en Argentina