MEDITACIONES PARA RECTIFICAR LA IDEA QUE TENEMOS DE NOSOTROS MISMOS
Enlaces a las anteriores publicaciones:
- Quién soy, qué soy.
- Lo que soy: hecho a imagen de Dios
- En quién y en qué me he convertido. “He pecado”.
- Mi realidad personal pecadora
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Mi realidad personal pecadora
(Propongo esta meditación con los puntos que San Ignacio da para meditar sobre los pecados personales de cada uno, en el libro de los Ejercicios).
- Quiero obtener en esta meditación un crecido e intenso dolor y lágrimas de mis pecados.
- Considerar, primero, el proceso de los pecados, es a saber, traer a la memoria todos los pecados de la vida, mirando de año en año o de tiempo en tiempo; para lo cual aprovechan tres cosas: la primera, mirar el lugar y la casa adonde he habitado; la segunda, la conversación que he tenido con otros; la tercera, el oficio en que he vivido.
- En segundo lugar: ponderar (es decir, tomar el peso; ver la gravedad) los pecados, mirando la fealdad y la malicia que cada pecado mortal cometido tiene en sí, dado que no fuese vedado.
- En tercer lugar, mirar quién soy yo, el que peca; tomar conciencia de mi pequeñez viendo quién soy en comparación de todos los hombres que existen han existido y existirán (¡uno entre miles y miles de millones!); 2º considerar qué cosa son todos los hombres juntos (los que existen, han existido y existirán) en comparación de todos los ángeles y santos del paraíso; 3º considerar qué cosa es todo lo creado (el universo entero) en comparación de Dios; pues yo solo ¿qué puedo ser?; 4º, mirar toda mi corrupción y fealdad corpórea; 5º, mirarme como una llaga y postema, de donde han salido tantos pecados y tantas maldades y ponzoña tan torpísima.
- En cuarto lugar: considerar quién es Dios, contra quien he pecado, según sus atributos, comparándolos a sus contrarios en mí: su sabiduría a mi ignorancia, su omnipotencia a mi flaqueza, su justicia a mi iniquidad, su bondad a mi malicia. Él es Creador, Padre, Salvador, Sabiduría, Omnipotencia, Verdad, etc.
- En quinto lugar: admirarme con crecido afecto, discurriendo por todas las criaturas, cómo éstas me han soportado viéndome pecar, cómo me han dejado en vida y conservado en ella; los ángeles, ejecutores de la justicia divina, cómo me han soportado y guardado y rogado por mí; los santos cómo han sido en interceder y rogar por mí; y los cielos, sol, luna, estrellas, y elementos, frutos, aves, peces, y animales; y la tierra cómo no se a abierto para sorberme, criando nuevos infiernos para siempre penar en ellos.
- Acabar con un coloquio de misericordia, razonando y dando gracias a Dios nuestro Señor porque me a dado vida hasta ahora, proponiendo enmienda con su gracia para adelante.
P. Miguel A. Fuentes, IVE
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Bendito Alabado y Adorado sea JESÚS en el Santísimo Sacramento del Altar 🙏