[21 Noviembre] Situación de la Iglesia Católica en Gaza – Madre María del Pilar Llerena Vargas, SSVM

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Parroquia Sagrada Familia – Gaza
Update 21/11/2023

Desde que comenzó la guerra, las hermanas del Rosario y la directora de la Escuela ocupan nuestra casa, arriba de la escuela parroquial. Nosotras, las Hnas. Pilar y Perpetuo Socorro nos mudamos a una habitación debajo de la casa de los sacerdotes, desde donde podemos estar más atentas a socorrer más rápidamente a la gente. Además del trabajo de sacristía, visitamos los enfermos, ancianos, niños, etc. y lo que nos pida hacer el P. Iusef, Vicario Parroquial.

Se han organizado grupos de diversos trabajos, limpieza, cocina, vigilancia, etc. Evidentemente, esto no es tarea fácil, especialmente cuando la tensión y el cansancio se ven de modo patente, después de vivir un mes y medio en “campamento” pero gracias a Dios, se ven ejemplos hermosos de generosidad y abnegación.

Los días en que la armada israelí avisa que habrá enfrentamientos o bombardeos cerca, todos se van a dormir a la Iglesia. Allí ayudamos a acomodar especialmente a los ancianos, y luego la gente en los espacios que quedan, donde pueden. Todos junto a Jesús, como suelen repetir.

Creemos que Él nos ha protegido hasta ahora como un escudo, a pesar de los bombardeos que hemos sentido a poca distancia, cuyas esquirlas han caído en los techos de nuestra Parroquia. Una vez, hubo tres heridos leves.
Ayer y hoy los bombardeos no han parado, sea de tanques como de aviones. Toda la noche y durante el día.

En cuanto a los enfermos y heridos, hemos recibido a los que cristianos que sufrieron la explosión en la Iglesia Ortodoxa y algunos que fueron rescatados de dicho bombardeo y que tuvieron operaciones graves. Uno de ellos necesita oxígeno permanente, otro con tratamiento por el cáncer, otros ancianos postrados, en fin, enfermos que necesitan su lugar y atención especial. Actualmente muchos niños y jóvenes están con colitis, y están siendo tratados por nuestros doctores. También hay algunos vecinos con el mismo problema que los doctores están atendiendo. Sabemos que es un grave problema el agua, la que hemos comprado, no es buena.

Hasta el momento ninguno de los camiones con agua y comida ha pasado al norte (donde estamos nosotros) van directamente al sur.

Las Hnas. de la M. Teresa y sus beneficiarios están bien, tienen electricidad permanente porque usan el generador.

En la Parroquia en cambio, al ser tanta cantidad de gente, también se ha tenido que racionar, se enciende 2 horas al día, lo suficiente para que carguen los celulares. En cuanto a las comunicaciones, hay algunas líneas que aún funcionan, pero no en cualquier lugar ni siempre.

La comida la hemos tenido que racionar previendo que esta guerra se alargue a 1 o 2 meses más. Estamos cocinando 3 veces por semana para todos. El resto, comen cosas más simples, lo que pueden ellos mismos conseguir. Hemos comprado leña ya que en cualquier momento se puede terminar el poco gas que tenemos y la necesitaremos para cocinar.

De las familias que actualmente albergamos, un 80 % perdieron sus casas y cuando termine la guerra no tienen dónde ir. Ellos pensaban que duraría poco esta situación, asi que llegaron con poca ropa, pero no de abrigo. Hemos tenido que comprar algo de ropa de modo provisorio.

Los niños juegan durante el día en los pocos espacios que quedan libres, ya que todo el complejo de la Iglesia está lleno de autos de las familias refugiadas. Apenas sienten los bombardeos, si estos son cerca, los niños lloran o entran inmediatamente a la Iglesia.

Los jóvenes se van acostumbrando poco a poco, los varones hacen turnos para vigilar durante las noches y en las mañanas.

Tenemos la Santa Misa dos veces al día y se reza el rosario el resto del tiempo. La oración es el único consuelo en medio de tanto dolor.

Hasta el momento, algunos de los cristianos con doble nacionalidad que han podido irse, se han ido. Suman en total 40 (hoy se van 18). Otros murieron por no contar con atención médica (3), por el bombardeo y derrumbamiento de un pabellón en la Iglesia Ortodoxa (18) y una anciana murió asesinada por un francotirador.

Las fuerzas israelies, hace dos días nos pidieron que dejáramos la Parroquia por dos días y luego regresemos, pero ¿a dónde ir?, dicen todos. Es salir a una muerte casi segura, sea por la inseguridad, sea por las condiciones en que están viviendo en el sur, especialmente para los ancianos, enfermos, niños y personas discapacitadas que tenemos a nuestro cargo. Por otro lado, el camino mismo es peligroso.

Por esta razón, hasta ahora, todos han decidido quedarse libremente en la Parroquia, aun sabiendo que también ese puede ser un lugar de riesgo. Pero como afirmaba un padre de familia, si morimos, morimos junto a Jesús.

Esperamos que esta guerra termine pronto y los cristianos puedan reconstruir sus vidas. Ellos son el fermento en la masa, son la luz que, aunque pequeña, brilla en lo alto e ilumina la ciudad; son el testimonio vivo de Cristo que murió y resucitó para salvarnos.

Recemos para que la presencia de los cristianos siga en Gaza y para que podamos también nosotros como Instituto seguir ayudando a los más necesitados, los más pobres, en este dolor tan atroz que, por Gracia de Dios, estamos también nosotros sufriendo con Amor, aun con peligros cada día.

De hecho, no hay ningún lugar seguro en toda la Franja de Gaza.

Sigamos rezando por la Paz

Madre María del Pilar Llerena Vargas, SSVM
Misionera en Gaza

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Comentarios 2

  1. María Victoria Cano Roblero dice:

    Padre Amado por tu infinito amor te pido por los que se encuentra sufriendo los desastres de esta guerra para seas tú llenando les de esperanza, fuerzas, fe y muchas bendiciones. Bendice también a los que aportan a los Organismos.
    Oro por los niños, jóvenes, ansianos y personas discapacitadas que esté proceso que están viviendo sea ese encuentro contigo dándoles el consuelo y la Paz .
    Siempre en mis oraciones.
    Dios me les bendiga y que nuestra Madre esté intercediendo por las necesidades de sus hijos.

  2. Deisy Basilia Díaz Gutiérrez dice:

    Dios en su infinita misericordia conceda la paz en ésta querida tierra, Él, por su infinito amor conseda consuelo para todos los que sufren ahí, acompañe a todos los hermanos y hermanas del IVE, que trabajan y cuidan a los enfermos en la parroquia en estos momentos, que la Virgen María los siga protegiendo con su santo manto.
    Seguimos orando por ustedes, por la paz en ese pais y en el mundo entero…

    Saludos y abrazos con mucho cariño desdes Guatemala.

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