CAMINO DE BELÉN
“Y vino, pues José… para empadronarse con María, su esposa, la cual estaba encinta.” (Luc. 2,4-5)
Había decretado el Altísimo que su Hijo iba a nacer, no en casa de José, sino en una gruta, en establo de animales, de la manera más pobre y penosa que puede nacer un niño.
A ese fin dispuso que César publicase un edicto por el que ordenaba que cada cual se empadronara en su ciudad de origen.
Al enterarse José de esta orden se debate perplejo: ¿Debería dejar a la Virgen María, o llevarla consigo, hallándose tan próxima a ser madre?.
“Esposa y Señora mía -le dice- por una parte no quisiera dejarte aquí sola. Y, por otra, si te llevo, me aflige la pena de lo mucho que habrás de sufrir en un viaje tan largo y en un tiempo tan inclemente. Mi pobreza no me permite llevarte con la comodidad que se debe“.
María le responde y lo anima: “José mío, nada temas. Iré contigo. El Señor nos asistirá“.
Bien sabía ella, por inspiración divina, y también por estar familiarizada con las profecías, que en Belén nacería el Hijo de Dios…
Tomando las fajas y pañales preparados, parte con José: “Y vino, pues José para empadronarse con María“.
Consideremos los devotos y santos coloquios de ambos esposos en este viaje, sobre la misericordia, bondad y amor del Verbo de Dios que dentro de poco iba a nacer, apareciendo sobre la tierra para la salvación de los hombres.
Consideremos también las alabanzas y acciones de gracias, los actos de amor y de humildad, en que se ejercitaban estos dos grandes peregrinos.
Mucho sufría, sin duda, aquella santa Virgen tan próxima a ser madre, en un camino tan largo y penoso y en tiempo de invierno. Pero todo lo sufría con paz y amor y ofrecía sus penalidades al Señor, uniéndolas con las de Jesús de quien era portadora.
Juntémonos también nosotros y acompañemos en el viaje de nuestra vida a María y a José. Y con ellos acompañemos también al Rey del cielo que va a nacer en una gruta: aparecerá por primera vez en el mundo como niño, y como el niño más pobre y abandonado que haya jamás nacido entre los hombres.
Roguemos a Jesús, María y José que, por los méritos de las penas que padecieron en este viaje, nos acompañen en nuestro viaje hacia la eternidad.
Felices de nosotros si en vida y en muerte nos acompañan siempre estos grandes personajes.
ORACIÓN
Redentor mío, sé muy bien que en este viaje te escoltan escuadrones de espíritus celestes. Pero ¿quién de la tierra te acompaña?. Sólo José, y María que te lleva consigo. No tomes a mal, que nosotros también te hagamos compañía.
Qué ingratos hemos sido… Ahora reconocemos el agravio que te hemos hecho: bajaste del cielo para ser nuestro compañero en la tierra. Y nosotros, ingratos, al ofenderte tantas veces, te hemos abandonado.
Cuando pienso que, tan a menudo, por nuestros gustos reprobables, nos hemos separado de Ti, renunciando a tu amistad, quisiéramos morir de arrepentimiento. Pero has venido para perdonarnos: otórganos tu perdón.
Nos arrepentimos con toda el alma de haberte vuelto las espaldas repetidas veces dejándote abandonado. Esperamos con tu gracia no dejarte ya más, ni separarnos de Ti, único amor nuestro.
Nuestra alma se ha enamorado de Tí, amable Dios Niño, Salvador nuestro. Ya que has venido a la tierra para salvarnos y dispensarnos tus gracias, te pedimos este solo favor: no permitas que jamás nos separemos de Ti.
María Santísima, henos aquí dispuestos a acompañarte en este viaje.No dejes de asistirnos, Madre nuestra, en el camino hacia la Eternidad.
Ayúdanos siempre, pero sobre todo cuando nos hallemos al fin de la jornada, próximos a aquel momento del que depende o, estar siempre contigo amando a Jesús en el paraíso, o estar siempre alejado de Ti, odiando al Señor en el infierno.Sálvanos, Reina nuestra, con tu intercesión. Y nuestra salvación consista en amarte a Ti y amar siempre a Jesús en el tiempo y en la eternidad.
Eres nuestra esperanza: de Ti todo lo esperamos.
San Alfonso María de Ligorio, Meditaciones de Navidad
Comentarios 2
Bellísima !! PIDO A DIOS LA GRACIA PARA Y PARA MUCHOS Q MI VIAJE Y PASO POR ESTA TIERRA SEA DE LA MANO DE JESÚS , JOSE Y MARIA.PARA ESTAR CON ELLOS ETERNAMENTE EN EL CIELO!!( quise decir para mi)..Dios los bendiga y Feliz Navidad!!
Amén.
Feliz Navidad para todos!