Día 11 – Nosotros somos esclavos de Cristo y de María
Queridos todos,
“He podido constatar una enorme diferencia de costumbres entre las poblaciones donde di misiones: unas por haber abandonado la práctica del Rosario, volvieron a caer en las malas costumbres; otras, por haber perseverado en rezarlo, se mantuvieron en gracia de Dios y progresaron día a día en la virtud” (San Luis María Grignion de Montfort, El secreto admirable del Santísimo Rosario, 113)
Nuestro Santo comienza a explicarnos más en concreto qué significa ser “Esclavo de María” y cuántas bendiciones y gracias se hallan tras este título de honor.
“Podemos pues, conforme al parecer de los santos y de muchos varones insignes, llamarnos y hacernos esclavos de amor de la Santísima Virgen, a fin de serlo más perfectamente de Jesucristo”. (San Luis María)
Letanías de La Humildad
De María nunquam satis
08 Para Siempre
Luchar contra mis defectos
¡Ave María y adelante!