3º Día – Medios para adquirir esta devoción y las disposiciones
Día 03 – Medios para adquirir esta devoción y las disposiciones convenientes que se deben tener, para consagrarse al Sagrado Corazón.
Queridos todos,
Le dijo el Señor a Santa Margarita:
“Como agradecimiento (a mi amor) no recibo de la mayoría de los hombres más que ingratitudes, irreverencias, sacrilegios, frialdad y desprecio”. “Mira cómo me tratan los pecadores… Sólo demuestran frialdad y rechazo ante todas mis atenciones para hacerles el bien… Dame por lo menos la satisfacción de suplir sus ingratitudes… Participa de las amarguras de mi Corazón”.
Meditemos hoy sobre los actos que podemos realizar para reparar ese Corazón herido del Señor.
Además, como también nos preparamos para entronizar al Sagrado Corazón en nuestros hogares, si bien en unos días más les enviaremos información al respecto, queríamos compartirles ya desde ahora, en el material extra, un pequeño libro donde además de profundizar en lo que venimos tratando, podemos ir conociendo cómo será la entronización y, sobre todo, lo que ella implica.
“Entronización es el reconocimiento oficial y social de la realeza del Corazón de Jesús en una familia cristiana. Y este reconocimiento reviste una forma sensible y permanente con la instalación solemne de una imagen del Sagrado Corazón en el lugar y sitio de honor de la casa y con el acto de consagración del hogar”. (Benedicto XV)
¡Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío!
¡Inmaculado Corazón de María, sed la salvación del alma mía!
1 – MATERIAL PARA LA CONSAGRACIÓN (este material es necesario hacerlo cada día)
1 – MATERIAL PARA LA CONSAGRACIÓN (este material es necesario hacerlo cada día)
Texto: [DESCARGAR] – [LEER ONLINE]
Audio:
2 – MATERIAL COMPLEMENTARIO (optativo)
Para aquellos que deseen profundizar más, les ofrecemos hoy un texto, importante para comprender en que consiste la Entronización del Sagrado Corazón,
03 Sagrado Corazón Rey en las Familias – P. Daniel Cima
3 – MÚSICA SACRA (optativo)
W. A. Mozart – Requiem – Domine Jesu Christe (KV 262)
¡Ave María y adelante!