[Dia 6] Medios para vencer los obstáculos que impiden sacar fruto de la devoción al S. C.


Queridos todos,

Después de ver los obstáculos para esta devoción, veremos los medios que Jesucristo mismo nos asegura que son los más idóneos para disminuir o destruir el amor propio y la soberbia oculta: la mortificación y la humildad, la cual va de la mano con la confianza.

El 20 de Junio de 1979 San Juan Pablo II nos recordaba:

Cristo dice en la liturgia del viernes: “Aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón” (Mt 11, 29).

Quizá una sola vez el Señor Jesús nos ha llamado con sus palabras al propio corazón. Y ha puesto de relieve este único rasgo: “mansedumbre y humildad”. Como si quisiera decir que sólo por este camino quiere conquistar al hombre; que quiere ser el Rey de los corazones mediante “la mansedumbre y la humildad”. Todo el misterio de su reinado está expresado en estas palabras. La mansedumbre y la humildad encubren, en cierto sentido, toda la “riqueza” del Corazón del Redentor, sobre la que escribió San Pablo a los efesios. Pero también esa “mansedumbre y humildad” lo desvelan plenamente; y nos permiten conocerlo y aceptarlo mejor; lo hacen objeto de suprema admiración.

Las hermosas letanías del Sagrado Corazón de Jesús están compuestas por muchas palabras semejantes, más aún, por las exclamaciones de admiración ante la riqueza del Corazón de Cristo. Meditémoslas con atención ese día.”

¡Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío!

¡Inmaculado Corazón de María, sed la salvación del alma mía!

Letanías al Sagrado Corazón (cantadas)

Letanías al Sagrado Corazón (recitadas)


Catequesis

Oración para prepararse a la Consagración


Libro la devoción al Sagrado Corazón de Jesús – Jean Croiset

Canto al Sagrado Corazón

Reflexiones Benedicto XVI – Mes Sagrado Corazón


¡Ave María y adelante!


Lecciones